sábado, 5 de mayo de 2012

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La relacion de un Padre con un su hijo, se inicia desde el Amor que Dios nos dá, desde que nos creo y como todo buen padre nos llena de amor, fidelidad, fortaleza, estabilidad, corrección y confianza, es de esta manera como todo varón debe reflejarse y llenar la vida de cada uno de sus hijos.

Está comprobada la importancia que tiene el Padre en la vida de sus hijos, el varoncito, ve en este su Superheroe, ellos estan viendo la postura, muecas y comportamiento de su progenitor y finalmente la imitan o la adoptan,  en la mujercita, ella en cambio evalua con sutileza, lo cariñoso, caballero y respetuoso que es el papá en casa y va elaborando ese principe azul, el cual para su edad adulta será el perfil que mantendra cuando llegue la hora de enamorarso o casarse.

Sabemos que el hecho de ser padre es una tarea complicada, pero no imposible, el compromiso que adquiere cada hombre con respecto de educar y guiar a los hijos es de responsabilidad, por que no hablamos solo de la responsabilidad de proveer como hombres o como cabezas de hogar, sino de pasar buen tiempo, es una labor ineludible que requiere constancia y mucha paciencia. De esta forma cada padre irá formando la estabilidad emocional en cada niño, que es la base fundamental de la familia, si como padres logramos formar niños estables, no dudemos en que llegaran a formar familias estables.

Existen antecedentes, que de cada padre agresivo, crece y se forma un hijo agresivo, te toda mujer maltratada se forma una niña que a la larga solo esperara ser maltratada, porque veran en lo cotidiano de su hogar, un reflejo en su adultez y esto llevaran a la práctica en sus hogares e irán formando lo que debio ser una bendición en maldición para otras generaciones.

Entonces creemos que un hogar es una bendición y que Dios a puesto al hombre como cabeza y no como cola, para llevar bendición y no maldición, deben lograr conocer las áreas de debilidad y fortaleza de sus hijos, reconocemos que la tarea no es fácil, pero es de vital importancia, los padres tienen que reconocer que Dios ha puesto en ellos una responsabilidad muy grande y un arma poderosa en sus manos, la de moldear a un buen hijo o la de hundir la vida de nuestros hijos, que sólo con amor y dirección podrán sacar a flote.

Definitivamente, los padres también se equivocan, son seres humanos,  es de valientes reconocerlo y levantarse y hacer las cosas mejor para la vida de nuestros hijos; recuerda que es mejor que seas tú hombre, el que le enseñe a patear esa pelota de futbol a tu hijo y no dejar que sea otra persona, y que seas tu papá el que tenga el primer detalle de regalar una flor o una rosa a tu hija, que puedan dizfrutar de una buena cena en un restaurant los dos, que seas su primera cita.  Que nadie te robe la bendición de ver a tus hijos felices, formados con buenos valores y sobre todo seguros y estables emocionalmente.

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